domingo, 29 de marzo de 2009

Pasa inmutable el tiempo
y yo aun te admiro.

Lo hago porque a pesar del viento
tu rostro sigue siendo el mismo
y tienes la misma figura de sirena

o de hada, y tus ojos los luceros
de la tarde y la mañana.
En las noches negras de desvelo,
tu sonrisa sigue siendo para mi un misterio,
porque ¿cómo podría una simple sonrisa
seguir siendo sonrisa y ministerio?
No lo se aún de cierto
si eres ángel que bajó del cielo
o quizás seas un hada
del bosque de los cuentos.
lo que seas, tus alas
te trasportan a mis sueños,
mis esperanzas, mis anhelos
y luchas sutilmente
por estar dentro de mi mente
aferrada a los recuerdos
y confiada en la misma suerte
de un futuro tan incierto...
por todo eso yo te admiro,
por ser una mujer tan fuerte
y por mostrarme esa magia tuya
y enseñarme sus secretos,
por creer junto conmigo
en el amor y sus defectos.
¿Hoy te mencioné cuanto te quiero?
tal vez no lo digo con encanto
pero cada instante te lo pienso
y por ello te admiro tanto
y te amo...te amo también por eso.

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